10 noviembre 2013

Con una sonrisa le dije: qué canción más triste. Y no lo entendió. Que las canciones no son tristes, que la tristeza depende de quien las escucha, decía.
Medio minuto después cogió el disco desgastado, lo tiró a la basura y se puso a llorar.

Con una sonrisa le dije: qué canción más triste. Y no lo entendió. Que las canciones no son tristes, que la tristeza depende de quien las escucha, decía.
Medio minuto después cogió el disco desgastado, lo tiró a la basura y se puso a llorar.

Palabras

Luciérnagas