Naíf

17 agosto 2009


Te pusiste enfrente mío, encendiste la cerilla y me incendiaste.

No sabía si reír o llorar. Tampoco ayudaban los rizos que te caían por la nuca.

Daba igual la conversación. Únicamente prestaba atención a tus manos.

Parecías aspirante a director de orquesta y creo que esperabas que a continuación te aplaudiera.

Luego te desvestí por un momento, y caí en cuenta que era mi subconsciente quien jugaba.

Recuerdo que preguntaste que qué pensaba, que parecía en otro mundo.

Y sonreí.

Porque era verdad.

Pero eso, no serás tú quien lo sepa.




Qué andarás haciendo ahora - Ismael Serrano

1 comentario/s:

Fran dijo...

Cuantisimo tiempo sin escuchar a este tipo...

Naíf


Te pusiste enfrente mío, encendiste la cerilla y me incendiaste.

No sabía si reír o llorar. Tampoco ayudaban los rizos que te caían por la nuca.

Daba igual la conversación. Únicamente prestaba atención a tus manos.

Parecías aspirante a director de orquesta y creo que esperabas que a continuación te aplaudiera.

Luego te desvestí por un momento, y caí en cuenta que era mi subconsciente quien jugaba.

Recuerdo que preguntaste que qué pensaba, que parecía en otro mundo.

Y sonreí.

Porque era verdad.

Pero eso, no serás tú quien lo sepa.




Qué andarás haciendo ahora - Ismael Serrano

Palabras

Luciérnagas