Instante

14 marzo 2007


Nunca quise tener coartadas para poder escapar de los mismos minutos. Quisiera que fueras mi pretexto para ver los minutos vestidos de risa. Puede que así perdurara el azul intenso compañero de lo entrañable.
No me cansaría mirar ese balanceo constante que me desquicia por querer que sea sólo mío. Ni me incomodaría escuchar ese laberinto de palabras sin sentido que acaba siendo la mejor declaración de intenciones.
No dar nombre a lo que nos pasara. Disfrutar sin más imitando años ya transitados. Sin ver qué hay alrededor. Qué se mueve o qué perece.
Ser hurtadores de silencios. Succionar el mundo por un lapso.
¿Qué más da lo demás cuando el tiempo frena regalándonos reverencias?

2 comentario/s:

piel de papel dijo...

Jo! Bruji!!!
Te superas cada día.
Cuando el tiempo frena, quiere decir que la reverencia es sublime!!!
El tiempo corre tanto que da miedo!!!
Vive, mi niña, vive!!!

Petonets!!!

Bruja dijo...

¡Gracias duendecillo! Y a eso me dedico, a vivir niño, a vivir...
¡Muaaaaaaaaacs!

Instante


Nunca quise tener coartadas para poder escapar de los mismos minutos. Quisiera que fueras mi pretexto para ver los minutos vestidos de risa. Puede que así perdurara el azul intenso compañero de lo entrañable.
No me cansaría mirar ese balanceo constante que me desquicia por querer que sea sólo mío. Ni me incomodaría escuchar ese laberinto de palabras sin sentido que acaba siendo la mejor declaración de intenciones.
No dar nombre a lo que nos pasara. Disfrutar sin más imitando años ya transitados. Sin ver qué hay alrededor. Qué se mueve o qué perece.
Ser hurtadores de silencios. Succionar el mundo por un lapso.
¿Qué más da lo demás cuando el tiempo frena regalándonos reverencias?

Palabras

Luciérnagas